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A pesar de toda la atención que han recibido las visitas virtuales en los últimos meses, no se puede pasar por alto el potencial de las telecapacidades para impulsar la respuesta operativa y la eficiencia.
En este sentido, la telemedicina permite aplicaciones que pueden facilitar la reducción de costes, la escalabilidad y la interoperabilidad mejoradas, los análisis de datos avanzados y los nuevos niveles de control personal sobre los datos del paciente. Todos estos factores pueden influir en la mejora de la experiencia del paciente.
Los líderes de atención médica interesados en explorar estas aplicaciones han de considerar un enfoque nuevo para la arquitectura de TI que esté impulsada por las soluciones en la nube y mejorada por el potencial del 5G.
La nube y la telemedicina
La telemedicina necesita la nube. Las aplicaciones locales involucran enormes cantidades de datos para enviar imágenes médicas y posibilitan la comunicación en tiempo real entre millones de dispositivos de salud digitales cada vez más sofisticados. La respuesta a este desafío ha sido confiar en los recursos informáticos y la flexibilidad de la arquitectura de la nube.
Muchas organizaciones del sector salud se han dado cuenta de que el progreso radica en acercar las cosas a casa a través de la “nube perimetral”, esto es, una solución cloud que tiene beneficios como menores costes de mantenimiento, capacidad de mantenerse al día con los nuevos requisitos de datos y mayor seguridad en relación a ataques cibernéticos y errores internos.
Por ello, el binomio soluciones en la nube y 5G en la atención médica proporciona como resultado que los proveedores pueden acelerar la implementación de una estrategia de telemedicina que abarque por completo el potencial de la Inteligencia Artificial (IA), el Internet de las Cosas Médicas (IoMT) y los análisis avanzados que respaldan la experiencia del paciente del futuro.
¿Están los sistemas de TI a la altura?
Los hospitales y los sistemas de salud están utilizando capacidades en la nube para impulsar algunas de sus iniciativas más importantes. Por ejemplo, utilizan IoMT para generar información del paciente en tiempo real y evitar posibles incidencias agudas. Esto sólo sucede cuando los sistemas de TI pueden optimizar un equilibrio de eficiencia y seguridad y establecer la aplicación del tamaño adecuado de tecnologías de telesalud, nube y 5G.
En este momento, la mayoría de los hospitales no pueden saber cuándo falla su equipo, con qué frecuencia se usa o incluso dónde se encuentran físicamente los dispositivos individuales. Si estos dispositivos están conectados de forma segura y privada a la nube perimetral, los hospitales pueden monitorearlos. Esto conduce a una mejor gestión de los costes y las operaciones, ya que los centros hospitalarios tienen la oportunidad de optimizar el uso de los equipos, rastrear la ubicación de las máquinas y predecir cualquier necesidad de mantenimiento o reemplazo.
Las aplicaciones de IA funcionan en una dinámica similar, con el potencial de predecir fallos en los equipos antes de que ocurra un accidente e incluso filtrar imágenes para lograr diagnósticos más rápidos y precisos, objetivos que la arquitectura de la nube perimetral permite aún más.
El servicio de telemedicina cada vez más basado en la nube
Los hospitales y los sistemas de salud interesados en el Cloud Computing y la nube perimetral primero deben identificar qué objetivos estratégicos existentes tienen el mayor potencial para ayudar a los pacientes. Lograr esto de la manera más efectiva posible requerirá el conocimiento de ciertos elementos, que incluyen:
- Proveedores de nube confiables que pueden respaldar el nivel de continuidad comercial y recuperación de datos.
- Medidas de seguridad que se alineen con los riesgos, tanto actuales como futuros.
- Una comprensión de los patrones normales de tráfico de datos que podrían apuntar a posibles amenazas de malware y ayudar a detectar infracciones.
- Un proceso de transición a buen ritmo que comience con datos menos complejos y confidenciales (como la nómina o la información de correo electrónico) para facilitar un cambio lento y medido.
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