Por todos es ya conocido que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado que el brote de COVID-19 es una pandemia mundial. Por ello es importante que las empresas refuercen la efectividad de la comunicación interna con los empleados durante estos tiempos de crisis en los que el factor emocional puede afectar al trabajo.
Una buena estrategia de comunicación con los empleados juega un papel clave en el soporte de las necesidades cotidianas de los trabajadores. De hecho, su expectativa #1 es que las organizaciones se comuniquen de forma efectiva con ellos. Sin embargo, según un estudio de Alight, sólo el 42% de los empleados afirma que su compañía hace un buen trabajo de comunicación en general.
6 pautas para la comunicación interna con los empleados durante la pandemia
1) Ser abierto y honesto
Sólo el 46% de los trabajadores piensa que la comunicación que reciben es abierta y honesta. El estudio de Alight muestra que, incluso en circunstancias normales, los empleados se sienten poco informados por las empresas. Ahora más que nunca es fundamental que las organizaciones sean abiertas y honestas en sus comunicaciones. La transparencia es clave en una situación de crisis e incierta como la que estamos viviendo. Por ello, una buena comunicación interna que explique a los empleados qué medidas ha tomado la compañía, cómo se ha preparado y cómo están abordando esta situación, ayudará a tranquilizar al equipo.
2) Proporcionar actualizaciones frecuentes
Por otro lado, el 61% de los trabajadores afirman que reciben actualizaciones periódicas sobre lo que sucede en su organización.
Con el ciclo de noticias de 24 horas y la sobrecarga digital, los empleados se ven inundados por información constante y posiblemente contradictoria. La voz de la organización debe incluirse en esa narrativa, por lo que es importante estar al tanto de las últimas noticias y mantener a los empleados informados de cualquier cambio o impacto en la empresa, su trabajo o sus beneficios. Anticiparse en las comunicaciones y comunicarse con frecuencia reducirá la información errónea y garantizará que los empleados no se sientan perdidos.
3) Conocer dónde están los trabajadores
Según el mismo estudio, el correo electrónico sigue siendo el canal de comunicación regular preferido para el 33% de los trabajadores, y otro 24% dice que prefiere el mail para temas urgentes o asuntos más específicos.
Preparar a las personas para una crisis potencial puede ser un desafío, pero comunicar las mejores prácticas e información no debería serlo. Para maximizar el impacto, las empresas han de comunicarse con los trabajadores en su canal de preferencia (móvil, correo electrónico, etc.). En este sentido, adoptar un enfoque omnicanal garantizará que los empleados estén viendo las comunicaciones en tiempo real, sin importar su ubicación actual ni el dispositivo que utilicen (ya que, hoy en día, se ha impuesto el teletrabajo para continuar con la actividad empresarial en aquellas organizaciones en que es posible).
4) Empoderar la participación de los gerentes
Sólo el 50% de los líderes empresariales confirman que tienen las herramientas y los recursos necesarios para mantener conversaciones con sus empleados.
Durante una crisis, puede ser difícil facilitar conversaciones reales, transparentes y de apoyo con cada miembro del equipo. Las organizaciones pueden facilitarlo equipando a los gerentes de todos los niveles y a los trabajadores con las herramientas necesarias. Los gerentes preparados pueden gestionar mejor las conversaciones y hacer que los empleados se sientan apoyados y escuchados durante todo el proceso de crisis.
5) Reconocer las circunstancias especiales de las personas
El 55% de los empleados indica que cuidar a sus hijos es una prioridad alta o moderada, y el 36% señala que lo es cuidar a alguien con discapacidades.
Cuando se trata de comunicación, un enfoque único para todos no es suficiente. Hay que considerar las necesidades de comunicación de cada uno de los trabajadores. También hay que tener en cuenta que las personas son más que simples empleados. Los padres y cuidadores, por ejemplo, pueden necesitar orientación adicional sobre el tiempo libre y los recursos de bienestar, y las comunicaciones adicionales pueden ser muy útiles para garantizar que se sientan apoyados por su compañía.
6) Mostrar comprensión y empatía
El 55% de los trabajadores piensa que se les confía la información valiosa y relevante que necesitan o desean.
Los malentendidos o retrasos en la entrega de proyectos pueden aumentar durante una crisis, pero mantener la calma y un elemento humano en las comunicaciones ayudará a las organizaciones a largo plazo. El objetivo de las comunicaciones de crisis es calmar los nervios, compartir información valiosa y relevante y proporcionar recursos que permitan a los empleados tomar decisiones informadas sobre su salud y seguridad.
A medida que COVID-19 continúa expandiéndose, las organizaciones deben monitorear y ajustar sus planes para mantener el ritmo de sus necesidades y las de sus empleados.