La forma en la que trabajamos está cambiando hacia una mayor dispersión geográfica; el trabajo remoto es un hecho que va en aumento, y esto requiere que los administradores estén preparados con las habilidades y las tecnologías necesarias que les permitan dirigir equipos de trabajo cuyos miembros se encuentran en diferentes puntos del país, incluso del mundo, y a los que casi nunca ven en persona.
Este aumento del trabajo remoto, especialmente impulsado por la mayor integración de las economías nacionales y la supresión de las barreras al libre comercio, aporta una amplia variedad de beneficios tanto para el trabajador individual como para la empresa, que a su vez contribuyen aún más a la multiplicación de los equipos dispersos. De hecho, durante la Cumbre Mundial de Líderes de Londres, más de un tercio de los ejecutivos manifestaron que esperan que para el año 2020, más de la mitad de sus empleados a tiempo completo estén trabajando de forma remota.
Así, los administradores ya se acostumbran a la idea de que no verán a su personal de forma regular (en algunos casos, jamás les verán), y aunque algunos trabajarán desde casa a pocos kilómetros de sus colegas, mientras otros lo hacen a miles de kilómetros de distancia con un huso horario distinto, la realidad es que muchas de las habilidades utilizadas para gestionar un equipo de trabajo local seguirán siendo importantes para administrar estos nuevos equipos de trabajo remotos y dispersos.
Las diferencias derivadas de la localización geográfica deberán ser superadas por los líderes de estos equipos con el fin de mantener su grado de rendimiento y sus resultados. Estamos por tanto ante una fase en la que surgen nuevos retos que precisan de soluciones concretas.
En este sentido, un estudio elaborado por la firma ILM acerca de la experiencia en estos nuevos equipos de trabajo remoto y disperso concluye que:
- Los miembros que trabajan a mayor distancia apreciarán más los beneficios del trabajo remoto.
- Los miembros que trabajan más cerca son más propensos a destacar los problemas derivados del trabajo remoto.
- La mayoría de los equipos de trabajo remoto se reúnen físicamente al menos una vez cada mes.
- Para el 84% de trabajadores, la mejora del equilibrio entre vida laboral y personal es la gran ventaja del teletrabajo.
- Como principales inconvenientes se destacan: mantener la disciplina del trabajo (88%), malentendidos a la hora de dar/recibir instrucciones (88%) y sobrecarga del buzón de correo electrónico (83%).
- El bienestar mental derivado del aislamiento y la soledad se plantea como uno de los mayores factores de riesgo.